Resumen

Las pruebas científicas de que la humanidad está rebasando los límites planetarios obligan a replantear con urgencia los paradigmas empresariales y económicos que han llevado a la civilización al borde del desastre. El Relator Especial examina las deficiencias de los marcos normativos voluntarios instaurados para velar por que las empresas respeten los derechos humanos, y aclara las obligaciones que incumben a los Estados de proteger el derecho a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible frente a los daños que causan las empresas. Para lograr un futuro justo y sostenible, se necesitan cambios sistémicos y transformadores: nuevos modelos empresariales, unas leyes relativas al clima y el medio ambiente que incorporen los límites planetarios, unas políticas fiscales que internalicen las externalidades y reduzcan la desigualdad, y unos objetivos sociales holísticos que remplacen el producto interior bruto (PIB) y el crecimiento ilimitado. Se ofrecen numerosas recomendaciones a los Estados.