Comentario por el portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas Seif Magango sobre ejecución inminente en Singapur

GINEBRA - Estamos sumamente preocupados porque las autoridades de Singapur hayan decidido la ejecución mañana de Mohammad Azwan Bin Bohari por tráfico de drogas, después de que se le encontrara en posesión de tres paquetes de diamorfina.     

Solicitamos que se detenga esta ejecución y que se conmute la condena por una pena de prisión apropiada.  La pena de muerte no es apropiada en casos relacionados con tráfico de drogas que no sean de extrema gravedad, y los cuales no resulten de forma directa e intencionada en muerte.

También apelamos al Gobierno de Singapur a aplicar de forma inmediata una moratoria sobre el uso de la pena de muerte, como un paso hacia su abolición.  Una moratoria no solamente serviría para alinear a Singapur con la tendencia global hacia la abolición de la pena capital, sino que también afianzaría aún más su compromiso con el fomento de la dignidad humana y el desarrollo progresivo de los derechos humanos.   Más de 170 Estados hasta la fecha han abolido o introducido una moratoria sobre la pena de muerte bien en su legislación o en la práctica.

La pena de muerte es incompatible con el derecho fundamental a la vida, incrementa el riesgo inaceptable de que se ejecute a personas inocentes, y además diferentes pruebas sugieren que tienen poco o ningún efecto a la hora de disuadir de que se cometan delitos.